Revista Tenerife

El Gobierno de Canarias ha desmentido recientemente las afirmaciones de que los pélets que aparecen regularmente en las costas de Tenerife provienen de Galicia. A pesar de que la composición de estos pélets es similar a los encontrados en Galicia, las autoridades insisten en que es «físicamente imposible» que hayan llegado al archipiélago desde esa región.

El portavoz del gobierno, Hernández, lamentó la situación y aclaró que los pélets son el resultado de vertidos que se están produciendo en diferentes partes del mundo. Aunque la composición de los pélets encontrados en la orilla de Bajamar es la misma que los de Galicia, la realidad es que estos residuos son un problema global.

Los pélets han estado contaminando las costas canarias durante años, y su aparición regular es una preocupación constante para las autoridades y los habitantes de la isla. A pesar de los esfuerzos por mantener las playas limpias, la lucha contra estos residuos es un desafío continuo.

El Gobierno de Canarias sigue vigilante y comprometido en su lucha contra la contaminación por pélets. Aunque la fuente exacta de estos residuos sigue siendo un misterio, la realidad es que su presencia es un recordatorio de la necesidad de abordar la contaminación marina a nivel global.

Preguntas Frecuentes
¿Qué son los pélets?
Los pélets son pequeñas partículas de plástico que se encuentran a menudo en las playas y en el mar. Son el resultado de la descomposición de los residuos plásticos que se vierten en el océano.

¿Por qué se dice que es «físicamente imposible» que los pélets de Tenerife provengan de Galicia?
La distancia y las corrientes marinas hacen que sea muy improbable que los pélets viajen desde Galicia hasta las Islas Canarias. Aunque la composición de los pélets es similar, es más probable que provengan de vertidos más cercanos o de la descomposición de residuos plásticos en el océano.

¿Qué se está haciendo para combatir la contaminación por pélets?
El Gobierno de Canarias está vigilante y trabaja para mantener las playas limpias. Sin embargo, la lucha contra la contaminación por pélets es un desafío global que requiere la cooperación de todos los países.